Foto: Alex Langley. De: Architectural Forum, junio de 1952. |
Por: Erick Alvarez
El año de 1952 fue relevante para la arquitectura de la ciudad de Nueva York, pues fue en ese año en que se terminó un rascacielos que será uno de los principales referentes de la arquitectura moderna o “Estilo Internacional”. Estamos hablando del Lever House, que al mismo tiempo consolidó la transición que estaba experimentando la parte central de Park Avenue, de la sensorial avenida de palacios en el cielo a uno de los primeros corredores corporativos de la ciudad a mediados del siglo XX.
El terreno
Los terrenos donde se ubica la Lever House, sobre la acera oeste de Park Avenue entre las calles 53 y 54, fueron ocupados desde la segunda mitad del siglo XIX hasta bien entrados por la década de los treinta del siglo XIX por edificios de viviendas de varios pisos de tipo “brownstone” que formaban parte de las construcciones originales que se levantaron sobre Park Avenue junto a las vías del tren que salían de la Grand Central Terminal.
A esa altura, durante el siglo XIX las vías que partían de la terminan se juntan a dos vías principales que corrían dentro de la línea natural de la avenida, de modo a que cuando se construyó Park Avenue por encima de las vías, a principios del siglo XX, estas casas quedaron prácticamente sin alteraciones (salvo la planta baja que quedó bajo el nivel de la nueva calle y tuvieron que rehacerse en el primer piso) mientras que en los alrededores comenzaron a elevarse elegantes edificios residenciales de hasta más de diez pisos que formarían parte del proyecto “Terminal City” que se realizó después de la reconstrucción de la terminal a su actual forma. Junto a los brownstones, del lado de Madison Avenue se construyó el rascacielos Art Decó de la compañía DuMont.
A mediados de la década de 1930 los brownstones fueron demolidos para dar paso a un conjunto comercial compuesto por un edificio de sólo un piso llamado Taxpayer Building, ocupado por locales y tiendas, y el cine Normandie. Ambos edificios, obra de los arquitectos Rosario Candela, Eric Gugler y Ben Schlanger, respectivamente, fueron construidos entre 1936 y 1938. El edificio comercial de un solo nivel (planta baja) que miraba hacia Park Avenue, se presentaba con líneas arquitectónicas muy sencillas y fachada principalmente forrada de cristal, divida en numerosos locales comerciales. El cine Normandie se alzaba sobre la Calle 53 como una estructura sencilla con interiores decorados de un estilo Art Decó tardío. Ambas construcciones parecían predecir el futuro que se avecinaba para esta parcela.
Una nueva casa para una fábrica de jabones
La compañía Lever Brothers fue fundada en 1886 por William Hesketh, en la localidad industrial inglesa de Bolton. La compañía se dedicaba, en un principio, a la fabricación de jabones y productos de limpieza para la miserable sociedad industrial de la época. Sus productos pronto tuvieron un éxito comercial y pronto promovió la fundación de la ciudad industrial de Port Sunlight, en la localidad rural de Warrington, una ciudad modelo con la que Lever pretendió dar una mejor calidad de vida a sus trabajadores, dándoles una alternativa a la degenerada vida urbana e industrial de las ciudades de entonces. William Lever, además, tenía un excelente gusto por la arquitectura, y él mismo se involucró con su escuadra de arquitectos en el diseño de Port Sunligt. Ese gusto se heredará a sus sucesores en el diseño de los edificios de la compañía.
En 1895 la Lever Brothers se instaló en los Estados Unidos al adquirir una pequeña oficina en Nueva York y pocos años después adquirió una pequeña fábrica de jabón en Cambridge, Massachussets, que posteriormente se convirtió en su sede central, y poco tiempo después abrió otra fábrica en Filadelfia. Poco tiempo después se fue haciendo con el mercado estadounidense de productos de limpieza.
Edificio que aloja la sede de Unilever, en Londres. Fue construido entre 1931 y 1933. Foto: Arild Vågen/Wikipedia Commons. |
En 1929 la Lever Brothers, en una maniobra considerada estratégica para la expansión de sus negocios, se fusionó con la compañía holandesa Margarine Union para crear la compañía Unilever, y tras esta fusión, su oferta se extendió al mercado de aceites y productos comestibles (sopas, helados y conservas), el mercado de los cosméticos (cremas, shampoo y productos de belleza como perfumes, desodorantes y fragancias), y posteriormente a los productos de higiene personal (productos dentales y de higiene íntima), entre otros. Con motivo de la expansión en Europa, la Unilever decidió construir dos edificios sede: un edificio monumental en Londres, de estilo neoclásico (1933); y otro en Rotterdam, en Holanda, diseñado ya dentro del lenguaje de la arquitectura moderna, y con influencias de la Bauhaus (1931). Para el mercado de Estados Unidos se mantuvo el nombre original de la compañía: Lever Brothers.
Sin embargo, los principales esfuerzos de Lever Brothers se centraron en el crecimiento del mercado estadounidense, pues para los años cuarenta tres compañías se disputaban más del 80 por ciento del mercado de los productos de higiene y limpieza en los Estados Unidos: Lever Brothers, Colgate-Palmolive y Pepsodent. No obstante, la competencia se volvió entre dos cuando en 1944 Lever compró la empresa Pepsodent que presidía el empresario Charles Luckman (1909-1999), quien poco tiempo después escaló para convertirse en el presidente ejecutivo de Lever en Norteamérica. El corto pero intenso mandato de Luckman al frente de Lever Brothers forzaría el traslado de la sede central de la compañía de Boston al corazón de Nueva York lo que se traducirá en la necesidad de contar con un nuevo edificio sede para el gigante corporativo a su altura.
Así, el 29 de abril de 1950, Luckman, quien además era arquitecto, hizo pública la necesidad de centralizar las operaciones de Lever Brothers en Norteamérica al revela el nuevo edificio sede que se ubicará en uno de los lugares más céntricos y significativos de Manhattan. La nueva sede se ubicaría en la acera oeste de Park Avenue entre las calles 53 y 54, en el sitio ocupado por el cine Normandie y el Taxpayer Building. La construcción del nuevo edificio pretendía comunicar las cualidades con las que la compañía identificarse ante su público. De esta manera, a través de un cuidado lenguaje moderno, pretendían transmitir la idea de juventud y prosperidad con los que estratégicamente querían poner a la venta sus productos en el público estadounidense.
Así, se presenta al público la maqueta de un edificio no visto hasta entonces en Nueva York: un edificio de forma de dos paralelepípedos, uno acostado para hacer un basamento de dos niveles y sobre de éste en la cara norte, una esbelta torre de 19 niveles totalmente forrada en cristal verde oscuro que se convertirá en el primer rascacielos de oficinas del sector privado con fachada de cristal y el segundo de la ciudad de Nueva York (después del Secretariado de la ONU). Un diseño simple pero revolucionario cuya autoría corrió a cargo de un equipo de arquitectos encabezados por Gordon Bunshaft, de la firma Skidmore, Owings & Merrill.
Gordon Bunshaft y Skidmore, Owings & Merrill
Gordon Bunshaft (1909-1990). Foto: Ecured, |
Gordon Bunshaft (1909-1990) nació en Buffalo, Nueva York. Se graduó como arquitecto en el Massachussets Institute of Technology (MIT), ganando numerosos premios durante su carrera, entre ellos, la beca MIT Honorary Travelling y la Rotch Travelling, con las que viajó por toda Europa entre 1935 y 1937, donde conoció las tendencias de vanguardia que estaban surgiendo de la arquitectura moderna. Tras su retorno a los Estados Unidos empezó a trabajar en la recién creada firma de arquitectos de Chicago Skidmore, Owings & Merrill (SOM), donde permaneció hasta 1942 debido a que tuvo que prestar servicio en el cuerpo de ingenieros del Ejército de los Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial. Entre su regreso de Europa y su participación en la guerra, Bunshaft tuvo una relación cercana con Ludwig Mies van der Rohe, aunque declinó su ofrecimiento de trabajar con él en su oficina de Chicago. Después de la guerra, en 1947, Bunshaft se reincorporó a SOM y se instaló en las nuevas oficinas de la firma en Nueva York, convirtiéndose en uno de sus principales socios en 1949.
Fue precisamente en este contexto donde Bunshaft, recibe la comisión del diseño del nuevo edificio para la compañía Lever Brothers.
Bunshaft se inspiró para el diseño del futuro Lever House en un edificio prototipo que presentó el arquitecto Nathaniel A. Owings de SOM, en 1946 en el que se planteaba un rascacielos de dos piezas superpuestas: una horizontal en la base con una planta baja sobre pilares y dos plantas elevadas; todo ellos como soporte de una terraza ajardinada desde la que se accede a la pieza en torre que alberga las oficinas. La torre es un prisma rectangular (paralelepípedo) de proporciones muy esbelta que se posa a su vez sobre los pilares de uno de los lados del podio.
Corte transversal de la torre del Lever House, circa, 1950. Foto: Columbia University /Archdaily.com |
Dicha propuesta causó revolución en la audiencia del sector inmobiliario cuando se presentó pues se trató de un nuevo concepto arquitectónico que rompía dramáticamente con la tendencia del rascacielos de piedra en forma de pirámide escalonada. El tratamiento de los espacios permitiría una instalación adecuada del aire acondicionado, y la fachada de cristal fomentaba una mayor iluminación en sus interiores.
Maqueta definitiva dek Lever House presentada en 1950. Foto: Anónimo. De: Progressive Architecture, Enero de 1951. |
Así, Bunshaft, en colaboración con su socia, Natalie de Bois, así como con Charles Luckman y con el diseñador industrial Raymond Loewy aplicaron el modelo de Owings para el diseño de un edificio elegante y moderno, que aprovecharía el pequeño solar que le fue asignado en Park Avenue para dar lugar un edificio con una plataforma horizontal de dos niveles que deja un orificio central que permite el paso de la luz al interior de la planta baja y una terraza al aire libre en el segundo piso que se convierte en el área de transición que en su cara norte, parte una esbelta torre de cristal de 19 pisos que se destacará en el paisaje urbano introduciendo un lenguaje totalmente moderno entre los rascacielos de piedra que forman el antiguo skyline de Midtown Manhattan.
Construcción e innovaciones técnicas
A punto de comenzar las obras de construcción, en octubre de 1950 se realiza una exposición en el Museum of Modem Art dedicada al trabajo de Skidmore, Owings & Merrill, donde el centro de atención se lo llevó la maqueta del Lever House, la cual provocó gran conmoción y repercusión por su espectacularidad.
Así, a finales de 1950 comenzaron las obras de construcción del Lever House, que se llevaron a cabo durante todo el año de 1951. A finales de ese año el edificio estaba prácticamente terminado y el edificio abrió finalmente sus puertas oficialmente el 29 de abril de 1952.
El Lever House casi terminado, al comenzar 1952. Foto: Herbert Spiegel. De: Fortune, Marzo de 1952. |
El nuevo Lever House tenía notorias aportaciones técnicas: el curtain-wall continuo, totalmente forrado en cristal color verde oscuro, se presentaba con una increíble liviandad, en donde se consiguió desplegar completamente por delante de la estructura portante del edificio, además de incluir vidrios con propiedades aislantes y perfilerías de acero inoxidable, lo que supuso en aquel momento un desafío constructivo de primera magnitud. Su carácter estanco, ideado no sólo para evitar la entrada de la polución del exterior al interior del edificio sino también para ahorrar en climatización, forzó a Bunshaft y a sus colegas a resolver el problema de la limpieza de las fachadas mediante un original sistema mediante una góndola o canasta de acero suspendidas desde la azotea, que se movía a través de un sistema de rieles incrustados en el techo, y fue la primera vez en la historia de los rascacielos que se implementaba este sistema automático de limpieza que hoy en día es muy común.
La estructura de acero del edificio se proyectó según la premisa de conseguir la mayor ligereza posible. La estructura incluía voladizos en los extremos, lo que aportaba una gran transparencia y levedad al conjunto. Interiormente contaba con grandes superficies de suelos técnicos (acero celular) que posibilitaban la eficiente distribución de los diferentes sistemas de cableado así como de falsos techos suspendidos que incluían un sistema integrado y modulado de iluminación fluorescente, totalmente novedosos en aquel entonces. Disponía de un cómo y exclusivo estacionamiento para ochenta vehículos en el nivel bajo rasante, lo que era muy poco habitual en la ciudad debido al subsuelo extremadamente rocoso de la isla de Manhattan. Asimismo, contaba con el más moderno sistema de detección y extinción de incendios, además de presumir que contaba con un ingenioso sistema de transporte interno de mensajes mediante conductos verticales y horizontales que convergían en el área de correos. Dichas amenidades eran novedades en esa época y hoy en día son un estándar para los rascacielos.
Una nueva arquitectura
El Lever House recién inaugurado, en abril de 1952. Foto: Ezra Stoller. De: Johnson-Marshall, Percy. "Rebuilding Cities". Aldine Pub. Co., 1966. |
A pesar de su diminuto tamaño en comparación con los edificios que le rodeaban, el impacto del Lever House en el paisaje urbano de Nueva York fue brutal. Por un lado, el nuevo rascacielos aportó una muy novedosa implantación que respecto a lo estipulado en la Ley de Zonificación que estaba vigente desde 1916, la cual obligaba a retranquear los edificios a partir de una determinada altura, dando lugar a una proliferación de antiguos rascacielos en forma de pirámides escalonadas con una torre en su remate, que fue el estándar todavía a comienzos de los años cincuenta y que en muchas ocasiones fueron el motivo de las numerosas representaciones del Manhattanismo que plasmaba Hugh Ferris en sus obras pictóricas.
El rascacielos visto hacia el suroeste. Foto: Ezra Stoller. De: Architectural Forum, Junio de 1952. |
Sin embargo, los promotores de la Lever House decidieron no dejar de lado las rígida ordenanza y sacarle provecho consiguiendo un esquema volumétrico nunca antes propuesto para la ciudad. Gracias a que la ocupación de la torre no superaba el 25 por ciento del total de área del solar (como lo marca el reglamento de Zonificación vigente), y la plataforma sólo tenía dos pisos, se consiguió elevar la torre sin retranqueos y sin limitación de altura. De este modo se logró construir el conjunto de dos piezas contrapuestas que será un referente de la arquitectura de mediados del siglo XX.
La torre vista desde el patio interior. Foto: Ben Schnall. De: Architectural Record, Junio de 1952. |
La extensión de la calle bajo el edificio, con la edificación levitando sobre una etérea trama de soportes aislados y el obsequio de la tranquila y ajardinada terraza, iba a ser otra de las sorpresas que incrementaron el interés propositivo del Lever House.
Aspecto nocturno del Lever House totalmente iluminado. Vista hacia el suroeste desde la esquina de Park Avenue y la Calle 54, en 1952. Foto: Ezra Stoller/ESTO/SOM. |
Pero el gran acierto de Bunshaft, y la más controvertida, fue la de disponer el prisma vertical en posición perpendicular a la dirección predominante de Park Avenue, iba a ser también la más eficaz para colmar las expectativas de singularidad y notoriedad del edificio.
Aquella fachada curtain-wall de cristal se apreciaba frontalmente, con toda nitidez, no sólo en la inmediata distancia corta sino sobre todo en la lejana distancia perspectiva, como si de una valla publicitaria se tratara (principalmente si el Lever House era visto desde el aire o desde los miradores de los edificios Empire State y R.C.A.). Además, su posición táctica con respecto a Park Avenue conseguía transmitir una gran verticalidad y prominencia, aun cuando se tratara de una pieza de tan solo 21 pisos.
Foto: Ben Schnall. De: Architectural Record, junio de 1952. |
Desde el punto de vista perceptivo, se exponía en la alineación su frente más esbelto, contrastando aún más su cabe por la presencia contrapuesta del podio horizontal. En conclusión, el Lever House consiguió presentar una escenografía del todo favorable para todos sus fines.
Impacto en el perfil urbano de Park Avenue
La presencia de la brillante y reluciente torre de cristal del Lever House en medio del paisaje urbano de decadentes palacios de piedra que flanqueaban Park Avenue fue considerada como una bocanada de aire fresco arquitectónico que no sólo rejuvenecía esta área en el centro de Manhattan que había entrado en decadencia, sino que anunciaba una nueva era en el urbanismo de la ciudad.
La presencia del Lever House propició que la plusvalía en los terrenos a su alrededor aumentara considerablemente, volviendo la zona de Park Avenue muy atractiva para una gran cantidad de compañías industriales y financieras que deseaban construir sus nuevas sedes corporativas alrededor del Lever House, lo que en pocos años acabará transformando el aspecto físico de esta zona de la ciudad, convirtiendo a Park Avenue en el primer corredor corporativo de edificios de oficinas con fachadas de cristal en Nueva York, que se consolidará con la construcción del Seagram Building cinco años después.
Legado
El hotel SAS Royal en Copenhagen, construido en 1960. Foto: Wikipedia Commons. |
La importancia de la arquitectura del Lever House fue tal que durante los años cincuenta y sesenta se construyeron numerosos rascacielos y edificios de oficinas que imitaban su estilo.
Edificio del Banco de Bogotá (Gordon Bunshaft, 1959), en Bogotá Colombia. Imagen captada a comienzos de los años sesenta. Foto: SOM. |
Por ejemplo, tenemos los casos de el edificio del Hotel SAS de Copenhague, construido en 1960, el edificio del Banco de Bogotá, de 1959 (diseñado también por Bunshaft) y en la Ciudad de México tenemos el caso del antiguo edificio de 19 pisos de los Seguros La Comercial (Héctor Mestre y Manuel de la Colina), construido entre 1958 y 1961 en la esquina del Paseo de la Reforma 116, esquina con la calle Milán (actualmente la sede de la Secretaría del Bienestar).
Así, una vez más, la ciudad de Nueva York ha venido utilizando y exportando sistemáticamente muchos de sus registros estilísticos y estratégicos, y cientos de curtain-walls obedecen a las mismas reglas y numerosas piezas dialogan con la ciudad de un modo similar.
En riesgo de demolición y revalorización
A finales de la década de los setentas el Lever House había quedado opacado por las grandes torres de cristal y acero que se construyeron a su alrededor durante los más de veinte años que pasaron desde su inauguración, y para entonces su presencia había quedado minimizada por la presencia de estas grandes moles y hacia 1980 empresarios inmobiliarios estaban planteando su posible demolición para ser reemplazado por una torre de oficinas de cristal de mayor altura con fines especulativos. Sin embargo, después de una larga lucha en su defensa, cuyo papel primordial fue que desde 1967 el edificio había quedado catalogado en el “AIA Guide to New York City”, una guía de arquitectura urbana publicada por el American Institute of Architects, el Lever House fue salvado de la demolición cuando en 1982 fue designado como lugar de referencia de la ciudad de Nueva York por la New York City Landmarks Preservation Commision, debido a su importancia arquitectónica. Un año después, fue introducido en el Registro Nacional de Monumentos Históricos de los Estados Unidos.
El Lever House después de la restauración de 1998-2002. Vista reciente del rascacielos desde la plaza del Seagram Building, en 2007. Foto: David Shankbone/Wikipedia Commons. |
A ser salvada su integridad como ícono arquitectónico, pasaron varios años hasta que en 1998 la firma que lo diseñó, Skidmore, Owings & Merrill, comenzó un proceso de restauración y modernización de su fachada para adaptar al Lever House a las necesidades del nuevo milenio así como revitalizar su arquitectura. El curtain-wall de su fachada original fue reemplazada en su totalidad por un nuevo curtain-wall con las mismas características de la original pero con materiales contemporáneos y cristales de alta tecnología del siglo XXI. Las obras de restauración, que tuvieron un costo de 25 millones de dólares, concluyeron en 2002, devolviéndole el esplendor a uno de los íconos más reconocidos de la arquitectura de mediados del siglo XX.
FUENTES CONSULTADAS
- Stern, Robert. A.M.; Mellins, Thomas; Fishman, David. New York 1960. Architecture and urbanism between the Second World War and the Bicentennial. New York. The Monacelli Press. 1997, pp. 338-339.
- Sin Autor. LEVER HOUSE, 390 Park Avenue, Borough of Manhattan. Built 1950-1952; architects Skidmore, Owings & Merrill; Gordon Bushaft, partner in charge and chief designer. New York, Landmarks Preservation Commision, November 9, 1982.
- Sin Autor. “Lever House Complete”. En Architectural Forum, junio de 1952, pp. 101-111.
- Sin Autor. “Lever House”. En Architectural Record, junio de 1952, pp. 130-135.
FUENTES ELECTRÓNICAS
- de Miguel, Sergio. La Lever House, New York. PDF disponible en : http://oa.upm.es/53659/1/2012_NY_DMG.pdf (Consultado el 20 de junio de 2021).
- Sin Autor. Lever House. Skidmore, Owings & Merrill (SOM). Disponible en: https://www.som.com/projects/lever_house (Consultado el 22 de marzo de 2021).
- Metalocus; Barba, José Juan; Pérez, Branly Ernesto. “Gordon Bunshaft y SOM en Nueva York: Lever House”. En. Metalocus. 9 de mayo de 2016. https://www.metalocus.es/es/noticias/gordon-bunshaft-y-som-en-nueva-york-lever-house (Consultado el 21 de junio de 2021).
- DeLuca, Gerald A. “Normandie Theater. 51 E. 53rd Street, New York, N.Y 10022”. En Cinema Treausures. Sin fecha. http://cinematreasures.org/theaters/7670 (Consultado el 21 de junio de 2021.
Hacia mucho tiempo que no entraba en eñ blog, pensaba que ya no estaba activo y veo que me equivocaba. :D La verdad que tendria que ser interesante ver estos cambios revolucionarios en cuanto a arquitectura. Este tipo de edificios antes no me gustaban mucho, pero ahora cada vez me gustan mas. Me parecen sobrios y elegantes. Bastante más que algunas de las nuevas torres que estan construyendo.
ResponderEliminar