Por: Erick Álvarez.
El Chrysler Building oficialmente abrió sus puertas el 27 de mayo de 1930 con una gran ceremonia presidida por Walter P. Chrysler y el público inmediatamente quedó cautivado por el rascacielos en todos los aspectos: fachada, murales, lobby y especialmente, por su remate Art Decó. El edificio fue un éxito total en el aspecto económico y a pesar de la Depresión económica desatada meses antes, para mediados de 1930 se habían alquilado la mayor parte de sus oficinas, siendo la compañía petrolera texana Texaco la principal inquilina.
A continuación hablaremos un poco de sus principales características arquitectónicas.