domingo, 21 de abril de 2013

El Chanin Building, el éxito personal hecho rascacielos




Por Erick Alvarez

Durante la segunda mitad de los años 20 la prosperidad económica y la especulación inmobiliaria provocaba la transformación continua del perfil de toda la ciudad, especialmente en el Distrito Financiero y en Midtown, y aunque para 1928, el Woolworth Building seguía ostentando el título del rascacielos más alto del mundo, los especuladores y desarrolladores ya estaban planeando los edificios que amenazaban por destronarlo: 


El proyecto del Larkin Building y su impacto en el skyline de Midtown
Manhattan, en 1926. Foto: Skyscraperpage.com.
Por ejemplo, en 1926 el empresario John Larkin propuso un super-rascacielos de 360 metros de altura y con 110 pisos que ocuparía la manzana entre la octava y la novena avenidas y las calles 41 y 42 (el sitio donde en 1931 se levantaría el primer rascacielos de la McGraw-Hill). Aunque ofrecía un lobby extra en el piso 82 y ascensores de doble cabina para facilitar el traslado de sus inquilinos y amplios espacios para oficinas, fue duramente criticado por el impacto negativo que producía en la zona (cerca de Times Square), así como por su ridícula forma, y finalmente Larkin abandonó el proyecto (Stern, Robert A. M., Gilmartin, Gregory, Mellins, Thomas. "New York 1930. Architecture and Urbanism Between the Two World Wars". New York. Rizzoli. 1987. Pág. 603). 

martes, 9 de abril de 2013

1928, inicia la carrera al cielo


Por Erick Alvarez

En 1928 el boom de la construcción en la ciudad de Nueva York llega a un estado de climax, y de paso se inicia la carrera al cielo que acabará por destronar al Woolworth Building como edificio más alto del mundo. Esta carrera al cielo inicia con la construcción del Chanin Building (que será terminado a mediados de año), y para finales de 1928 ya estaban en construcción los edificios del Bank of Manhattan y Chrysler, y la firma de arquitecto Shreve & Lamb habían dado a conocer su proyecto del Waldorf-Astoria Office Building, un rascacielos de 50 pisos que se proyectaba construir en el sitio del antiguo hotel Waldorf-Astoria, en la acera oeste de la Quinta Avenida entre las calles 33 y 34. Sería el primer paso de un largo camino que culminaría en la concepción y construcción del monstruo de 102 pisos llamado Empire State Building.

Con este pequeño breviario cultural, iniciamos nuestro panorama general de 1928, el año en que arranca la carrera al cielo.